CIUDAD DE MÉXICO.

La dirigencia nacional del PAN y su candidato en Coahuila, Guillermo Anaya, presentaron una queja ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos contra el gobernador de esa entidad, Rubén Moreira, y el procurador Homero Ramos, por actos presuntamente violatorios de  derechos humanos, con cateos, persecución política y citatorios a más de 20 militantes panistas para que den declaración como testigos e indiciados  por delitos electorales, asociación delictuosa y lavado de dinero.

A las afueras de la CNDH, Guillermo Anaya acusó que los panistas están siendo intimidados, además de militantes de otros partidos de oposición, por ello acudirán a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.

“Tenemos conocimiento que van alrededor de 20 citatorios que hacen, les solicitan que en termino de 24 horas asistan a la Procuraduría o si no serán llevados a declarar, algunos de indiciados o testigos -porque delitos- por presuntos delitos electorales, asociación delictuosa, lavado de dinero y un sin fin de delitos que están tratando de sembrar”.

Por su parte, el encargado jurídico del PAN, Eduardo Aguilar, aseguró que están violando más de 20 garantías individuales de los panistas en Coahuila, entre ellos usar a las instituciones de la entidad con fines facciosos.

“Están violando el derecho del Estado mexicano, de los mexicanos, de los coahuilenses a tener información veraz y cierta, están violando el principio de presunción de inocencia, están violando el principio de sigilo de las investigaciones, están violando el derecho de asociación electoral, de reunión, porque lo que quieren hacer es intimidar este movimiento, lo que quieren hacer es dar un mensaje que cualquiera que se mete en política o en contra de los Moreira estará siendo perseguido, están haciendo una persecución política cómo en los años 60, cómo en los años 70, por eso estamos ante la comisión de derechos humanos a implorar que se trate de manera justa los derechos humanos de los coahuilenses”

Indicó que a los domicilios cateados no les dieron el acta circunstanciada ni la presencia de dos testigos, como lo establece la ley.