Por: Arturo Rosas H.

Ciudad Victoria, Tamaulipas.- Al cumplirse el segundo año de la entrada en vigor de la Reforma Educativa en México, los ex secretarios generales del SNTE en la sección 30, reconocieron que el Estado ha retomado el control total de la educación en Tamaulipas y en el país, pero rechazan que el sindicato del magisterio vaya en un camino que debilita su fuerza como organización.

Por el contrario, el SNTE ha logrado regresar a tomar su papel en defensa de los derechos de los maestros en Tamaulipas, y será una organización que no se va callar nada.

Aunque no lo dicen por su nombre, admiten que en el pasado reciente (con la dirigencia de Rafael Méndez Salas), la reforma educativa trajo un distanciamiento con la base magisterial porque “no pudieron transmitir el proceso, las ventajas y desventajas de esta reforma”.

Así lo analizan Jorge Guadalupe López Tijerina, Oscar Martín Ramos Salinas, Enrique Meléndez ex líderes de la sección 30 del SNTE en Tamaulipas.
Para Enrique Meléndez, el tema de la Reforma Educativa, en el momento en que se autorizó, repercutió al interior del Sindicato de maestros en el país, ese fue el punto de quiebre para asegurar que el SNTE estaba derrotado y no.

“Se creó un grave problema para las secciones en los Estados”, recuerda.

Sin embargo hoy, señala que si bien los años de la bonanza terminaron al grado que los integrantes del Comité seccional tiene detenido sus salarios, la Sección 30 en particular, tiene que recuperar la autoridad y la fuerza que representa frente al magisterio.

Esa parte los divide su opinión porque consideran que la bonanza dentro del SNTE ha terminado, “pero no la hubo como tal”.

Oscar Martín Ramos Salinas, lo explica: “En el tema educativo, a lo mejor estábamos acostumbrados en tiempos de antaño, únicamente a verlo reflejado como un sindicato, que luchaba por incrementar los bolsillos de los trabajadores, porque así se veía.

“Hoy en día, hay un nuevo rostro del Sindicato, no se ha dejado de lado, seguir luchando por los derechos de los trabajadores. Somos los principales que defendemos la escuela pública como organización sindical”.

¿Ya no tienen esa influencia ante el poder ejecutivo?

“Siempre ha existido un respeto a las instituciones, y es lo mismo que el Sindicato pide, es lo que está pidiendo el actual Secretario General Rigoberto Guevara, respeto”.

¿Les incomoda que ahora la autoridad fije posturas educativas?

“Antes se señalaba que el SNTE en México, estaba apropiada de la educación y cuando se habla que el Estado recupera la rectoría de la educación, nosotros nunca tuvimos la rectoría, se demostró”.

¿Que sucedía entonces?

“El sindicato no está acostumbrado a dejar espacios vacíos y en gobiernos anteriores, hubo muchos espacios vacíos que el Sindicato tuvo que complementar, porque a nosotros nos interesa avanzar en la educación”.

En medio de todo este escenario, la reforma educativa, el poder que a rematado el estado en la educación, los ajustes salariales a los propios integrantes del Comité seccional y los procesos de evaluaciones para los maestros en Tamaulipas, el profesor Guadalupe López Tijerina, asegura:
“El sindicato de la sección 30 del SNTE, no ha caído en una debilidad, creo que el Sindicato, con esto retoma su papel fundamental que es la defensa de los intereses laborales de los trabajadores, ese es su papel original”.

-El reclamo, no ser sumisos, ¿ese papel tendrá que jugar hoy el sindicato?
“Exactamente”. “Si ellos fallan -el Estado-, la relación sindical tiene los mecanismos para lograr que se corrija y no se afecte los intereses de los trabajadores”.

¿El Sindicato debe estar callado?
“El sindicato tiene que estar alerta de que todas las acciones, que sea en la mejora de la educación, se dé sin lesionar los intereses laborales de los trabajadores”.

¿Qué pasa si se equivoca el nuevo Estado?

“La estructura, hasta los jefes de departamento, puede ponerlos el gobierno, pero de ahí para abajo, entra la mano del Sindicato, Directores, Supervisores, Coordinadores, Maestros de Grupo, son del sindicato y ellos no se equivocan, saben de las necesidades en los salones de clases a diferencia de ver las necesidades de un escritorio”.