viernes 20 de septiembre de 2024, Ciudad Victoria, Tamaulipas

Vienen más renuncias

Por Crónica Digital MX
mayo 22, 2019

Lo que dice Germán Martinez en su carta de renuncia a la Dirección General del IMSS es apenas una pequeña muestra de lo que se está viviendo al interior de la administración Pública Federal: recortes de presupuestos a rajatabla sin medir consecuencias, despidos injustificados, improvisaciones, cierre de oficinas y un maltrato a la burocracia tradicional de parte de los nuevos servidores públicos de la Cuarta Transformación.

Es más, lo que dice en su carta el ahora ex director del IMSS, es nada con lo que realmente se está viviendo, aseguran los que están adentro. Cuando los neoliberales llegaron a tomar las riendas de este país, allá a principios de los años ochentas con Miguel de la Madrid a la cabeza, tenían muy clara la idea de que adelgazar el aparato de gobierno, entonces obeso e improductivo, era urgente. Las recetas dictadas por el Fondo Monetario Internacional (FMI) eran implacables e insensibles, pues su objetivo era acabar con el Estado paternalista y fulminar los programas sociales asistencialistas que se llevaban gran parte del presupuesto, por eso el argumento de que con el neoliberalismo crecieron los pobres y los ricos se volvieron más ricos. Eso funcionó con el capitalismo salvaje que con el tiempo fue desenmascarado por los propios creadores de esas tesis económicas miserables y discriminatorias, ¿pero ahora?. Después de que Andrés Manuel López Obrador decretó la muerte de la política neoliberal en México, ¿como se justifican los recortes criminales y deshumanizados que ha ordenado el gobierno de la austeridad republicana o franciscana?.

En el Seguro Social no hay medicinas para los enfermos de cáncer; los tratamientos para enfermos con VIH se suspendieron, y lo peor: los medicamentos para tratar la diabetes o hipertensión están desaparecidas del cuadro básico. En todos los hospitales púbicos del país, no hay ni jeringas para poner una inyección; los pacientes que son internados tienen que llevar sus propios medicamentos.

Los superdelegados federales que fueron cuestionados desde su llegada y que los gobernadores hicieron perros del mal, alegando que llegaban a restarles poder político y económico, hoy, son unos guiñapos de la administración federal que nadie pela y que no resuelven además la más mínima tarea administrativa. Ellos son los que están padeciendo la crisis gubernamental más aguda. Hasta donde se sabe, la mayoría están incómodos, inconformes y dispuestos a renunciar si esto no cambia pronto. Son los representantes del gobierno federal en las entidades y su trabajo es nulo, aparte de ser señalados de que esto no camine, cuando el mal viene desde arriba.

Ayer el presidente López Obrador, luego de lamentar la salida del gabinete de Germán Martínez, anunció que vendrán más renuncias, lo que da a entender que los problemas van a seguir.

¿Hacia dónde va esto?. No se sabe, pero los signos de desesperación al interior del gobierno se están notando y encendiendo las alarmas. Lo peor está por venir.