Morena exageró con el punto de acuerdo aprobado para reconocer a José Ramón Silva Arizabalo, el Secretario de Desarrollo Energético.

Pareciera ser un culto a la vanidad, porque entonces, cada uno de los secretarios y hasta el gobernador debería de recibir un reconocimiento.

Me explico; los integrantes de la Diputación Permanente aprobaron un punto de acuerdo, mediante el cual la 65 Legislatura del Congreso del Estado de Tamaulipas, expresa el más amplio reconocimiento al Titular de la Secretaría de Desarrollo Energético del Gobierno del Estado.

El objetivo, señalar su destacada participación y organización del Congreso mexicano del Petróleo, realizado en Tampico, Tamaulipas, donde se dio cuenta a la comunidad internacional el enorme potencial energético de nuestra entidad federativa.

Pues hombre, que manera de rendir un reconocimiento a un funcionario que esta obligado de hacer de su trabajo.

Aun y cuando, se lo hicieran al gobernador, por la formación que tiene el mandatario, estoy seguro que no permitiría una acción de ese tamaño.

Lo que hace José Ramón Silva Arizabalo, es permitirse un acto de vanidad insatisfecha.
Si hoy, hay funcionarios y Secretarios de Gobierno que tomaron el rumbo de su responsabilidad o que realmente se están aplicando para responderle a los Tamaulipecos, pues se tardaron, porque desde hace dos años deberían haber pensado en su jefe inmediato.

Quien ha enfrentado los embates de las adversidades en el estado, por todos los obstáculos que le le dejó Cabeza de Vaca, es el gobernador Américo Villarreal y quien por cierto a recibido de todo.

Los que deben hacer el reconocimiento en todo caso, son los ciudadanos; ¿pues no que el pueblo es el que manda?.

José Ramón Silva Arizabalo, debería de salir antes de que se ratifique este dictamen en el pleno, ha decir que no es necesario ese reconocimiento.

Con que su patrón lo reconozca, en privado o en publico, tiene más oficio que mandarse hacer reconocimientos porque hoy, quien debería ser reconocido es el mandatario.

Incluso, para llegar a un reconocimiento, se requieren voces ciudadanas con peso y autoridad, al menos, tendría un mayor acto de validez y no es que los legisladores no lo tengan, porque finalmente son los representantes ciudadanos en el Congreso.

El tema, es que José Ramón Silva Arizabalo, solo está haciendo el trabajo al que se comprometió con Tamaulipas, lo demás, demuestra vanidad excesiva de la apariencia.

La marca que hoy se le ha dado a José Ramón Silva Arizabalo, lleva una etiqueta de creído, engreído, ostentoso, orgulloso, petulante, presuntuoso, vano.

Por cierto, ayer, el diputado Humberto Prieto Herrera Presidente de la Diputación Permanente, parece no haber intimidado por el Fiscal Anticorrupción Raúl Ramírez.

Dicen los morenistas que una de las lecturas es que, al Fiscal le pidieron agarrarse de la declaración de las Comapas para citar a Humberto y en especial porque, ha sido principal opositor.

Incluso, saben que la ‘disposición’ que asumió el Fiscal Anticorrupción, no es otra cosa que, mantener comprometidos a quienes mande citar, aunque sean actos que aparenten trabajo en el combate a la corrupción.

Para el diputado Humberto Prieto, es una reacción pensada políticamente y tenerlo bajo estrés, pero quienes conocen al Presidente de la Diputación Permanente, como que esos actos los ve cotidianos después de tantos años de ser oposición.

Por lo pronto no se quedó callado y consideró que la Fiscalía Anticorrupción, debería dar trámite a por lo menos 100 carpetas de investigación que forman parte de la administración.

El hecho es que la Fiscalía Anticorrupción es una de las trincheras del ex gobernador panista y todo indica que esta área mantiene esa protección.

Aquí mismo, donde el diputado Humberto habló del tema, el gobernador Américo Villarreal hizo un anuncio que lo pone nuevamente como operador de su propio gobierno.

Anunció un incremento de apoyo a los productores de sorgo de 270 millones de pesos, un gesto que demuestra la importancia estratégica del campo tamaulipeco en la economía del estado y la nación.

Podra hablarse del gobierno de Américo bien o mal, porque tiene sus asegunes, pero hoy no solo garantiza el respaldo financiero directo del estado, sino que también continúa abriendo puertas en el ámbito federal para asegurar que los productores de sorgo reciban los recursos necesarios para mantener a Tamaulipas como líder nacional en la producción de este grano.

El aumento en el apoyo económico demuestra que la administración estatal está enfocada en la eficiencia y en maximizar los beneficios para los productores, con inversiones que están cuidadosamente dirigidas para fortalecer el sistema productivo del campo tamaulipeco.