Trae un trastorno que afecta sus emociones. Se llama neurosis y debe acudir a un centro de recuperación.

Desde el título con el que describe su video posteado más de 12 veces en  su mismo muro de Facebook, denota una gran irritación y furia, sin duda, un tipo muy violento.

Una persona con esas características denotan un claro conflicto psicosomático emocional.

Ademas, despacha al frente de un departamento en donde bien puede existir un conflicto y encuentro de intereses, pues, ocupa la Gerencia Comercial de la Comapa zona Conurbada, y es dueño de un negocio de relleno de botellones de agua.

Existen versiones que adeuda más de 700 mil pesos a la misma Comapa por consumo de sus negocios y que tiene familiares en la nómina. Esta columna está indagando al respecto.

Vi a Miguel Pérez Álvarez con la mirada de odio y la clara intención de golpear al reportero de Televisa del Golfo, Israel Ponce. Su video lo muestra.

El funcionario ‘gandalla’ y aprovechado que hoy nos ocupa, convocó artera y traicioneramente al joven reportero para pedirle su derecho de réplica sobre la denuncia que el investigador realizaba en cuanto al medidor que presuntamente, tenía alterado el funcionario y dueño de la empresa de relleno de garrafones “San Miguel”; en donde la materia prima y fundamental, es precisamente el agua.

Perniciosamente, planeó todo para que el joven periodista perdiera postura y de esa manera exhibirlo, lo maltrató e insultó. Al lunes siguiente, se manifestaron un grupo de ciudadanos pidiendo su renuncia.

Profesionales de la información y de la televisora que Israel Ponce representa en el puerto de Tampico y parte del centro del estado, como José Devesa Roca, Ignacio Morales, Aron González, Ivonne Barcerott, solo por mencionar a algunos, no hacen otra cosa que cumplir con darle seguimiento a su agenda editorial.

No es justo que un ensoberbecido funcionario que llega con un estandarte y simulando una moral que no tiene, lo insulte, le grite y le manoteé al mero estilo de un policía de los años del “Negro Durazo” en la ciudad de México.

Abusó de la buena urbanidad y el nivel de trato que tiene la prensa del sur del estado hacia el funcionario, particularmente la de Tampico. Tienen mucha clase y urbanidad.

El señor Pérez Álvarez, debe pedir una disculpa pública por la agresión, pero además, debe honrar a los vientos de cambio que lo remolcaron al inmerecido puesto que hoy detenta. Su actitud y comportamiento ‘chafa’, degrada a la Comapa y a su administración actual.

Abdicar a su puesto público, sería un parte aguas de ejemplo para la conducta de los demás funcionarios panistas y a la vez, sería ponerles la muestra a las administraciones priístas. Su cese enaltecería y daría prestigio a la administración de Adolfo Cabal Ruíz y al mismo Gobierno de los Vientos de Cambio.

Admiro a la prensa, a los periodistas, a los locutores y reporteros del puerto. Son muy tolerantes, en cualquier otra parte del estado, este sujeto ya estuviera demandado. Tiene mala leche, mala entraña y debe ser demandado por agresiones y violencia contra la libertad de expresión.

Alterar medidores en negocios de ese giro es una práctica común.

¿Por qué pensar que el avieso Miguel Pérez Álvarez no lo haría?..

Miguel Pérez pretendía robarse el préstamo que le hizo la administración priísta del chaparrito y sinvergüenza Gustavo Torres Salinas, con quien fue regidor.

Que hábilmente lo haya descubierto y exhibido la administración municipal actual, es otro boleto.

Si no, por supuesto que los hubiera expoliado.

El medidor evidentemente fue de nuevo arreglado, para convocar al reportero investigador y filmar el video que tituló exasperadamente: “Aclaración contra Televisa compartan!!!!” (sic)

Voy a parafrasear al abogado, político, escritor, titular de la Secretaria de Hacienda en el gobierno de Venustiano Carranza y por cierto, también periodista e investigador, Luis Cabrera Lobato: “Es acusado de corrupto y ratero, no de pendejo.

Muchas gracias y hasta pronto…