viernes 20 de septiembre de 2024, Ciudad Victoria, Tamaulipas

LOS REYES MAGOS.

Por Crónica Digital MX
enero 6, 2020

Mientras los niños les piden en sus cartitas a Los Reyes Magos juguetes tradicionales o los ya ultramodernos (como tablets o celulares), los adultos desean paz y tranquilidad para nuestro país así como mejores condiciones económicas, según encuestas que se han realizado.

Cierto, GASPAR, MELCHOR y BALTAZAR no hacen milagros y, dicen, no cumplen los deseos de las personas adultas pues están sumamente ocupados en atender las peticiones de las niñas y los niños por lo que a cada uno de nosotros, como ciudadanos, nos corresponde aportar nuestro granito de arena para que México salga del tremendo bache en que se encuentra sumido.

Las cosas no se solucionan con cartitas, eso queda claro, aunque respetemos la ilusión de los infantes que creen en Los Reyes Magos pues son creencias que no le hacen daño a nadie y si algún simpático o escéptico padre de familia se queja de que eso es promover el consumismo ya es de acuerdo al cristal con que se miren las cosas.

Porque hay de regalos a regalos. Un dispositivo electrónico puede valer miles de pesos y fomentar el sedentarismo en el niño mientras que una pelota de unos cuantos pesos lo puede hacer sumamente feliz y realizar a la vez actividad física alejando posibles diabetes y otras enfermedades crónicodegenerativas. Es una ecuación muy simple.

Nadie está en contra de la tecnología y de sus asombrosos avances pero nuestros juguetes tradicionales deben seguir siendo fomentados por todos nosotros para que no se pierdan en el ingrato cajón del olvido. Si esto último ocurre lo vamos a lamentar.

Ahora bien:  De veras que da risa ver a funcionarios y dirigentes de partidos políticos aprovecharse siempre de la llegada de Los Reyes Magos para llevar agua a su molino y anunciar que les pidieron cosas positivas para los más de 125 millones de mexicanos que habitamos este país. La hipocresía en su máxima expresión.

Navegando en la web nos encontramos a dirigentes de partidos políticos que, por enésima ocasión, confiesan que les pidieron a Los Reyes Magos que a México le vaya mucho mejor en este 2020 pero jamás se refieren  a los miles de millones de pesos que cuestan esos partidos al erario público y lo peor es que no han servido para nada.

Son dirigentes que se han enriquecido sin pudor alguno dándose  auténtica vida de reyes mientras sus seguidores viven en la miseria.

Y no falta el funcionario que poniendo cara de inocencia (pamba al que se ría) afirma que les pidió a Los Reyes Magos ser mejor servidor público para ayudar al pueblo cuando sus acciones demuestran todo lo contrario.

Y no dude Usted que el exGobernador de Veracruz JAVIER DUARTE haya pedido en su cartita salir por fin de la cárcel aunque le acaban de negar su petición de prisión domiciliaria. Es obvio que si Los Reyes Magos supieran de este tenebroso personaje no le ayudarían en lo más mínimo. Peor si se enteran de la que escribió mil veces en su libreta que merecía abundancia y de que ambos, presuntamente, ordenaron administrar a los niños enfermos de cáncer agua destilada en lugar de los medicamentos correspondientes.

También podría pensarse que el Gobernador de Morelos, CUAHUTEMOC BLANCO les pidió a los Reyes Magos ser el próximo Presidente de la República aunque como gobernador ha sido un verdadero fiasco.

Por lo que respecta al expresidente ENRIQUE PEÑA NIETO su cartita más bien podría ser una súplica para que ya no lo sigan involucrando en multimillonarios escándalos de presuntos fraudes cometidos por quienes fueron sus colaboradores.

Es lamentable ver como los políticos prácticamente “secuestran” a Los Reyes Magos para llamar la atención. Lo mejor es que los dejen en paz y les permitan cumplir sin contratiempo alguno con las peticiones que les hacen los niños en sus cartitas.

Si Usted cree o no cree en Los Reyes Magos es algo muy respetable y nadie se lo va a reprochar pero, por favor, no les diga a sus hijos que no existen y que son un simple invento. Al menos dejemos la amargura por un rato y comencemos este 2020 con algo de optimismo.

¿Sale…?