La decisión de Morena para llevar la designación de candidatos hasta el 19 de marzo, debe estar pensada para acortar el tiempo de los reclamos y la desbandada.

Pareciera que los amarres que están haciendo y los documentos que los obligan a firmar a los aspirantes, no les dan la seguridad para evitar una reacción adversa a la unidad.

Además, para el 19 de marzo, es muy posible que el resto de los partidos políticos e incluso Movimiento Ciudadano, ya tenga definidos a sus candidatos, salvo el caso del PRD que ahora va solo.

De tal suerte que, los aspirantes de Morena que terminen irritados por no estar en las listas de los designados, decidan irse a otro partido político para participar en un cargo de elección popular.

Incluso, bajo un alto índice de presión, Morena puede conciliar con el PT y el Partido Verde para que le den un espacio a quienes saben, pueden llegar también a la alcaldía; solo que en este proceso, estos partidos políticos sí tienen asegurada la llegada de sus candidatos así que este escenario, se ve difícil.

Lo que sí va traer esa incertidumbre, es que el golpeteo interno se va mantener, Morena tendrá a sus propios críticos y adversarios dentro del partido y eso puede ser más riesgoso el 2 de junio. El enemigo adentro.

Una salida es que hoy exista alguien al interior de Morena, con la capacidad de ir conciliando con todos los aspirantes y principalmente con aquellos, que saben, no serán los candidatos y si ya de forma temprana se están presumiendo a los buenos y a los malos, pues las cosas no saldrán muy tersas.

Aquí los riesgos crecen porque, uno de los responsables de ‘operar’ es el Presidente del Consejo Político de Morena, Rómulo Pérez Sánchez, así que es muy posible que se vea una irritación al interior del partido, por esa falta de oficio que existe.

Hasta hoy, Rómulo no ha podido amarrar ni evitar el golpeteo que existe entre aspirantes en diferentes municipios.

Pero aquellos que, ven desde ahora que, llegar al 19 de marzo no servirá de nada, pueden ir pensando desde hoy, buscar un espacio en otro partido político.

Vaya entramada en la que se está metiendo Morena en Tamaulipas y en cinco entidades más, donde también se decidió extender el proceso de designación de los candidatos locales.

Solo para no dejar pasar el dato, en el caso de Victoria, se nota más competencia entre Lalo Gattás y Tico García, al interior de Morena, para poder enfrentar al PAN en la capital del Estado.

Con esa extensión que Morena se entregó, le da tiempo para pensar en una lista fuerte de candidatos a Diputados Locales de Mayoría e ir pensando en los que tendrán que ir en la lista plurinominal.

Morena no se puede dar el luego de improvisar con sus legisladores en la LXVI legislatura y en particular, por los tiempos que vienen.

Requieren de operadores políticos, especialistas en temas jurídicos, que tengan el arte de cabildear, conocer los temas financieros (económicos y de fiscalización), en materia de salud, electoral, pero principalmente que puedan llevar desde la tribuna un debate argumentado.

Ahora que el Cachorro Cantú ya no irá como diputado, (ha sido diputado en la Legislatura 63,64 y 65 sin que nadie lo haya impugnado por su tercer ingreso al Congreso) en la lista plurinominal recibió la orden del ex gobernador Francisco García Cabeza de Vaca que ponga a Gerardo Peña, Ismael García Cabeza de Vaca, Vicente Verástegui, Enrique Rivas y cuatro primeros lugares más para mujeres, claro que todas, deben de formar parte del grupo del gobierno anterior.

Por ello, Morena debe pensar bien a quién enviará al Congreso de mayoría y de Pluri, porque la guerra legislativa que viene, será de gran peso y altura.

Sin pasar por alto la grilla interna de otros partidos, donde de plano cada día se ve más sepultado como instituto político, es el PRI y en cada una de las entidades se ve la crisis y la renuncia de sus cuadros políticos que quedaban, en particular los ex gobernadores.

El tema es que Alejandro Moreno, Alito, se está encargando de seguir exprimiendo al CEN del PRI, terminarlo e incluso llevarse el dinero, como lo denunció la diputada federal Monserrat Arcos hace un par de semanas.

A partir de esta elección, el PRI va comenzar a perder más presencia en todo el país, quizás su registro nacional lo mantenga, por los acuerdos de coalición, pero de qué va a la baja, va, y con ganas de convertirse en el nuevo PRD del país.

El fondo sin fondo
La falta de transparencia y las imprecisiones en el tema del Fondo de Capitalidad, para Ciudad Victoria, hacen ver que el Gobierno del Estado no ha definido la inversión para 2024.

Una de las salidas que dio la Secretaria de Finanzas Adriana Lozano, es que aun se están aplicando algunos recursos del 2023, pero no hay datos precisos sobre la inversión. Se conocieron algunos gastos pero no hay cifras o no se quieren dar a conocer.

Quizás ahora, para este año, el Fondo de Capitalidad se vaya olvidar y si bien, cada año se tenía pensado invertir 350 millones de pesos e irlos incrementando cada año, pues, primero no se gastó eso en el 2023 y segundo será más difícil se haga en el 2024 y es una decisión que seguramente está proponiendo quien tiene la responsabilidad de cuidar los pesos y millones del estado.