jueves 19 de septiembre de 2024, Ciudad Victoria, Tamaulipas

El enigma de Morena

Por Crónica Digital MX
septiembre 24, 2020

Si el proceso interno para elegir dirigente nacional de Morena está tan desaseado, y los pleitos entre las «tribus» parecen irreconciliables, incluso, con todas las pifias del gobierno lopezobradorista y el desencanto de un amplio sector que votó por ellos, ¿por qué entonces, en todas las encuestas nacionales y locales pronostican que el partido de la Cuartaté va a ganar casi todo en el 2021?.

Las respuestas a bote pronto aseguran que esto ocurre porque nadie cree ya en todos los partidos tradicionales que han gobernado mal al país, y sobre todo porque la gente asocia por completo al partido con Andrés Manuel López Obrador.

La ciudadanía común, la que no milita en ningún partido, pero que sí vota, no les interesan los conflictos internos de Morena. La escaramuza y el escándalo lo hacen los líderes de siempre; es la burocracia partidista, la que ha vivido por años de las prerrogativas y puestos directivos. 

La otra pregunta que se están haciendo algunos, es: ¿podrá ganar Morena una elección cuando no tiene estructura como partido?. En los pasados procesos, ya siendo poder, Morena, aunque ganó las gubernaturas de Puebla y Baja California, su votación se cayó en más del 50 por ciento en donde hubo elecciones. En Tamaulipas por ejemplo, solo ganó una diputación de mayoría de las 22 que estaban en disputa en la elección del 2019. En Puebla, aunque ganó la gubernatura, perdió la capital que representa casi el 40 por ciento de los votos de ese Estado.

La verdadera existencia de Morena se conocerá en las urnas del 2021. El partido de AMLO sigue siendo una quimera que enajena y enloquece a muchos. Su máximo logro es haber conquistado el poder en apenas 5 años de existencia. Es una marca mediática de éxito y que a diferencia de los demás partidos no tiene tantos negativos. Lo único cuestionable es que en su interior hay  tiros y troyanos conviviendo y buscando una transformación y una reinvención. Panistas, priistas, y perredistas que en el pasado fueron corruptos e inmorales, y que de la noche a la mañana se curaron se proclaman ahora como los próceres del cambio verdadero. Eso es Morena: una ilusión envuelta en una esperanza que Andrés Manuel como ícono máximo, la ha sabido vender a un público harto de padecer los peores gobiernos.

En todos los análisis que se han hecho, Morena es un enigma, porque es nuevo en el entorno electoral. Vive un proceso de desgaste natural en el poder y que en la próxima elección será avaluado; su suerte política y su futuro se va a definir en la elección más grande de la historia del país el próximo año. Si gana, todos pronostican, se quedará en el poder un buen tiempo. Su ADN priísta pinta para que así suceda.

Andrés Manuel López Obrador, es el que mejor concibe el fenómeno de Morena; él lo creó y lo diseñó, y sabe que en el 2021 se juega todo junto con su partido. Tiene el poder político, el poder económico, las instituciones y la marca partidista para mantenerse en el puesto que tanto soñó con alcanzar. Si se van o se quedan, eso se sabrá dentro de un año. Por lo pronto, ahora todos se sueñan y se proclaman morenistas. Los pleitos y las pugnas son parte del folcklor de la lucha por el poder.