En ningún momento de este sexenio, se pudo apoyar a las Policías Locales y menos se acercó a instalar nuevamente a la Policía Municipal, en particular en el caso de Tamaulipas que, fueron eliminadas en el 2011.

La seguridad, desde entonces, ha estado viviendo inestabilidad muy seria, porque cuando los agentes de la entonces PGR tomó el control de la Policía Ministerial, muchas investigaciones se truncaron y lo más grave, muchos casos de homicidio no pudieron avanzar.

Un escenario más delicado fue cuando los elementos del ejército Mexicano tomaron el control de la Policía Municipal e incluso, en el peor sexenio que ha tenido Tamaulipas, el de Egidio Torre Cantú, al ejército se le mantuvo en todos los aspectos, se les dio hospedaje, comida, patrullas, gasolina y se les dio un bono extra al salario militar que recibían para que les dieran protección a los Tamaulipecos.

La tarea bien o mal se hizo y con Francisco García Cabeza de Vaca, se lanzó una campaña para empoderar a la Policía Estatal y frenar los actos delictivos y en apariencia, se logró porque, hasta se presumió el control que se tenía y en los municipios más violentos y las carreteras más inseguras.

Hoy se sabe que el grupo armado que había creado el gobierno panista, fue para darle seguridad a un solo personaje y atacar a gente inocente; la familia del joven Ingeniero acribillado afuera de un Oxxo en Río Bravo es uno de ellos o los migrantes asesinados en la frontera chica y quienes después de muertos les prendieron fuego a la unidad donde estaban los cuerpos e incluso aquel ataque donde también los GOPES acribillaron a los integrantes de una familia y hasta los vistieron con ropa militar pero eran tan burdos que, las botas se las pusieron al revés, no pues bueno.

El hecho es que desde entonces Tamaulipas, en su época moderna, a batallado para tener una policía leal y que atienda los llamados de la ciudadanía.

Con casi 600 ataques y 17 policías de la Guardia Estatal asesinados o muertos en enfrentamientos, una lectura justa que en este sexenio se puede hacer, es que tenemos una Policía valiente, entrona y sabe responder a los ataques de la delincuencia organizada, pero entonces surgen cuestionamientos: ¿porqué no sea podido controlar o poner a raya a la delincuencia?
Las respuestas pueden llegar en cascada, pero un hecho muy cercano es que desde el gobierno de Felipe Calderón y pasando por Enrique Peña como de Andrés Manuel López Obrador, el haber militarizado la seguridad no ha dado resultado.

Todo lo anterior llega porque en los próximos días el Congreso Federal va analizar la iniciativa dictaminada sobre la Guardia Nacional, para que dependa de la SEDENA y así tener el control de la seguridad el Ejército.

La realidad con la que se va encontrar el nuevo gobierno de Claudia Sheinbaum no sencillo y si bien en sus filas tiene a un operador de inteligencia como es Omar García Harfuch, habrá que conocer qué modificaciones hará en la ley federal y que estas bajen a los congresos estatales, para que su área pueda entrar con más ‘libertad’ a la lucha contra la inseguridad.

García Harfuch, se va convertir en el súper secretario de seguridad en materia de inteligencia y ser el responsable del Centro Nacional de Inteligencia y encabezará la Unidad de Inteligencia Financiera, lo que va generar la necesidad de modificar las leyes orgánicas de la UIF y del Cisen para que pasen a formar parte del área de control del súper secretario.

El secretario de seguridad va tener que dialogar y acordar con los militares para poder bajar investigaciones y que se generen detenciones, pero en un escenario donde ‘choquen’ en la estrategia o por los resultados de la investigación, se podría llegar nuevamente a que, el haber militarizado a la
Seguridad Pública no fue la mejor idea, aunque en el momento haya sido un freno intimidatorio contra la delincuencia.

Lista segunda
etapa de Gattás

En cada reunión de gabinete municipal que tiene Lalo Gattás, sus funcionarios traen sus números pero en la calle hay otros datos y el primero quien a asumido con autocritica, los avances o rezagos, es precisamente el Presidente Municipal.

Quienes forman parte de esas reuniones, aseguran que el Alcalde a sido director y claro: “está en ustedes si se quieren reelegir”, les advierte y de entrada, el Alcalde ya trae una lista de quienes no han podido, con creatividad, resolverle los problemas de la ciudad.

Así que no sorprenda a muchos que, dentro de doce días, se conozca una lista de directores en diferentes áreas del Ayuntamiento Local.

A reserva de lo que se exponga el próximo 24 de septiembre, cuando Lalo Gattás tome protesta para un segundo período en funciones como Alcalde de la Capital de Tamaulipas, está será la etapa de buscar trascender sexenalmente.

Su carrera está construida y le ha costado poder ascender, así que por su formación, hace difícil pensar que va dejar espacios sin atender en esta nueva etapa, es más, está obligado a callar muchas bocas y para ello requiere un equipo de funcionarios que sean operadores, creativos, relacionados con el Estado y con el nuevo gobierno federal, con amigos en la cámara baja y cámara alta, para hacer gestiones, bajar recursos, tener programas adicionales o una bolsa presupuestal para más robusta.

Lalo Gattás, requiere de un equipo que dé el golpe de timón en la capital de Tamaulipas para que todas sus áreas, muestren un mayor avance y no tenga conflictos por la falta de recursos… gente operativa y con sentido sociales y en particular que continúen con un trabajo de sentido humanista como lo ha establecido el gobernador Américo Villarreal.

Por lo pronto, todo está listo para que el próximo 24 de septiembre a las 17:30 en el Teatro Amalia G de Castillo Ledón rinda protesta como Presidente Municipal reelecto en Ciudad Victoria, el primer alcalde que alcanza esta figura que la ley electoral otorgó a Lalo Gattás y que la mayoría de los victorenses decidieron ratificarlo en las urnas el pasado dos de junio.