La complejidades del acuerdo comercial más relevante en el que participa México como socio de una de las principales potencias mundiales, es saludable para todos que los negociadores de lado mexicano, tenga la habilidad de presentar propuestas atractivas para las políticas de dominio y expansión de los negociadores del gobierno Yanqui. Por lo mismo es menester que los representantes mexicanos entiendan que el país requiere de las plataformas propias de Estados Unidos para conservar y repuntar el crecimiento en comercio exterior, pero que por lo mismo es necesario establecer los contrapesos para que los productores y exportadores mantengan la dinámica de ganar, ganar.
Hasta ahora aunque la crítica ha sido constante hacia el presidente mexicano Enrique Peña Nieto de parte de la mayoría de los sectores y de los ciudadanos, justo es reconocer que si bien son cuestionables las deficiencias previsoras ante el comportamiento de los mercados. Es menester reconocer, que hay perfiles en su gabinete como el Secretario de Economía Ildefonso Guajardo, es una de las figuras mexicanas metidas de lleno en las negociaciones del Tlcan.
Que ciertamente es imposible decir lo mismo del ministro de relaciones exteriores como es Luis Videgaray, que ha mostrados sus incapacidades de negociación con la administración Trump. Pero además los cargos que ha desempeñado pareciera que les han quedado grandes.
Y ante la inminente salida de Agustín Carstens de la gubernatura del Banco de México, necesario es perfilar al sucesor de éste, no sólo para dar certidumbre a la inversión externa y a los mercados internacionales, sino también para fortalecer la economía mexicana, que le permita a los mexicanos, sobre todo a la clase media, ante los escenarios previstos para el 2018 y el cierre de la segunda década del siglo XXI, si bien no mejorar pero por lo menos conservar el nivel de vida.
Uno de los prospectos para ocupar el puesto de gobernador de Banxico es precisamente Ildefonso Guajardo porque ha mostrado habilidades, capacidades y destrezas para desempeñar esa función. Por otro lado se le mueve a “patita” a Luis Videgaray, pero con solo recordar las deplorables condiciones en que dejó la secretaría de hacienda que heredó a José Antonio Meade, es suficiente.
Este último, Meade Kuribreña está ante una circunstancia coyuntural, ya que por un lado tiene la oferta “riesgosa” de convertirse en candidato del PRI a la presidencia de la república para la elección del 2018 y perder, pero también es uno de los prospectos que el propio Agustín Carstens proyectó como su sucesor natural.
Pero habrá que esperar cuál será la decisión final de quienes mueven a ese partido, en este caso al PRI, para definir su prospecto a la candidatura presidencial, que está ya muy cantada, durante la última asamblea priísta, el secretario de hacienda fue aclamado por la militancia, a pesar de que Meade no tiene militancia panista.
En otro orden, ayer los representantes de los partidos políticos que participarán en el proceso estatal electoral y que contenderán en las elecciones del próximo año, se reunieron ayer en el Instituto Estatal Electoral, donde revisaron las propuestas ciudadanas para participar en como funcionarios de los 43 consejos municipales electorales, que se encargaran de organizar las elección en el mismo número de municipios tamaulipecos.
El periodo de revisión según el organismo electoral comprende tres días a partir de ayer domingo y durante tres días más los partidos podrán presentar las observaciones que consideren relevantes. En esta fase, Edgar Arroyo Villarreal y Patricia Rodríguez Cárdenas secretario del Ietam y coordinador electoral del organismo tuvieron a su cargo la atención de los partidos políticos.
En tanto, que las fuerzas federales, reforzaron este fin de semana las tareas de seguridad, que el Grupo de Coordinación Tamaulipas realiza en la ciudad fronteriza de Reynosa, se busca pacificar la región fronteriza desde Reynosa como epicentro de la estrategia para aminorar la incidencia de inseguridad.
