Si en verdad los debates sirven para que la ciudadanía esté informada y se forme criterio para emitir su voto, no debe quedar duda de que los mexicanos sensatos, preparados y que les gusta lograr el éxito con el trabajo y a base de esfuerzo, ellos no votarán por quien no tiene ideas para gobernar un país; no votarán por quien critica actos de corrupción pero entre sus adeptos carga un lastre de casi 100 personajes corruptos que forman parte de su primer y segundo círculos de confianza.

Adivinó: es Andrés Manuel López Obrador otra vez el gran perdedor del debate presidencial, por no tener ideas claras al responder los cuestionamientos de los periodistas; por no salirse de su disco rayado de la mafia del poder; por quedar en evidencia su falta de capacidad para encabezar la presidencia de la República.

En este tercer debate no sólo fue el gran perdedor, sino que AMLO fue desenmascarado a nivel nacional por Ricardo Anaya.

En un episodio de este tercer ejercicio democrático, Anaya cuestionó y demostró con pruebas que López Obrador tiene como a uno de sus asesores a un empresario de apellido Ryobo, quien recibió -afirmó Anaya- contratos por más de 170 millones de pesos por parte del gobierno de la Ciudad de México cuando AMLO estuvo como jefe de gobierno. El mismo Ryobo estuvo a punto de recibir un contrato en la obra del Aeropuerto de la Ciudad de México pero finalmente no se lo otorgaron. Antes de que Ryobo se quedara sin contrato del Aeropuerto, López Obrador estaba callado, pero después hasta acudió al lugar de la obra acompañado de Ryobo, siendo captado en un video donde afirmó que este empresario construyó numerosas obras en la Ciudad de México.

Pero lo más grave que podría pasar si eventualmente ganara López Obrador (que en lo personal no creo que suceda) es que este personaje sin capacidad de pensamiento, pretende eliminar la Reforma Educativa, cuando desde hace al menos dos años está rindiendo buenos resultados.

Y reitero, desde hace dos años (o más en algunos estados) los egresados de las Escuelas Normales que son las encargadas de preparar a los jóvenes y certificarlos como licenciados en educación, son quienes a base de un Examen de Oposición han logrado una plaza como maestro, situación con la que miles de jóvenes se han beneficiado, ya que antes quien estaba preparado no podía acceder a una plaza laboral como profesor.

Al eliminar la Reforma Educativa, AMLO quiere que regrese la repartición indiscriminada de plazas a pseudo-maestros, que en muchos de los casos como se hacía antes, eran personas que no tenían ni preparatoria, pero a base de dinero o infuencias o heredadas por algún familiar, desplazaban a los verdaderos maestros, quedándose frente a grupos escolares personas sin noción alguna para ejercer esa fundamental profesión.

¿Eso quieren los jóvenes que estudian en las Escuelas Normales del país?… Ellos y solo ellos tienen la obligación de defender su derecho a obtener una plaza laboral a base del esfuerzo y capacitación y preparación, por lo que deben ser protagonistas y no dejar que alguien sin escrúpulos les quite esa oportunidad.

Volviendo al debate, en esta tercera plataforma para los candidatos sucedió lo mismo que en los anteriores, es decir un López Obrador irrespetuoso con sus compañeros panelistas; José Antonio Meade resignado al tercer lugar, y aquí un pequeño cambio, el Bronco ahora fue “palero” de dos aspirantes, de Meade y de AMLO, por aquello del pacto entre Peña Nieto y López Obrador.

Se me pasaba, Ricardo Anaya también presentó pruebas del Pacte entre Enrique Peña nieto y el “mesías” Andrés Manuel.

Como siempre la mejor opinión es la de usted, amable lector. Hasta la próxima