jueves 19 de septiembre de 2024, Ciudad Victoria, Tamaulipas

Américo y el 2022

Por Crónica Digital MX
febrero 10, 2021

Después de la entrevista que nos concedió el senador Américo Villarreal Anaya en su oficina del Senado, donde confiesa que está preparándose para el 2022, y que ve condiciones en Tamaulipas para que la Cuarta Transformación siente sus reales, atiza y acelera la sucesión gubernamental, sin perder de vista que antes hay que pasar la aduana del 2021, en donde se definirá el futuro de los proyectos y las perspectivas del PAN y de Morena, que serán los protagonistas en ésta y todas las luchas que vienen. El PRI, hasta ahora, pinta para ser un espectador en esta batalla.

Por dentro y por fuera de Morena, todos coinciden que el senador Américo Villarreal es quien lleva hasta ahora la delantera en las preferencias, pues a diferencia de los otros aspirantes, por su condición de senador, el hecho de haber ganado una elección (haiga sido como haga sido), el afecto personal que le tiene el presidente López Obrador, y los amarres y alianzas que ha venido tejiendo en las altas esferas del gabinete de la 4T y que muchos ignoran, refuerzan la versión de que hoy, Américo es el puntero.

Algunos, que ignoran el crecimiento político y la suerte con la que ha corrido AVA, dicen que no será y que no tiene los alcances para serlo; y se entiende, porque estos que opinan así, se quedaron con la versión del doctor Américo, el cardiólogo, el Director del Hospital General, el subsecretario de Salud, el junior que ocupó cargos de media importancia gracias a su padre el ingeniero Américo, ex gobernador de Tamaulipas. Estos que ahora le ponen peros a sus aspiraciones, desconocen que en los últimos dos años, el doctor se transformó, y tanto la suerte y las circunstancias lo han colocado en una dimensión que muchos en Tamaulipas ignoran, por eso cuando dice: «me estoy preparando para el 2022», es porque los escenarios que jamás imaginó, se han ido acomodando a su favor. 

Esto, por supuesto que no quiere decir que él vaya a ser el candidato o el próximo gobernador, es una realidad que está pasando y que se tiene que consignar.

En la ciudad de México, en el primer círculo de la dirección nacional de Morena, y en el gabinete de AMLO, al senador lo ven con ojos de candidateable, pero no quitan la mirada de lo que pudiera hacer el tampiqueño, Rodolfo González Valderrama, que trae una formación política y un bagaje profesional que lo pone en automático en el escenario del 2022. De hecho, en la cúpula del poder de la 4T, donde se toman finalmente la decisiones, sólo ven en la lucha final de Morena: a Américo Villarreal Anaya y a Rodolfo González Valderrama. 

Rodolfo González Valderrama es un funcionario de la 4T que está en el corazón del Presidente López Obrador, pero su circunstancia depende casi al cien por ciento de lo que haga su entrañable y poderoso amigo, el senador Ricardo Monreal. 

A los demás que han manifestado su intención de ser, simplemente no son incluídos en la agenda del próximo año, al menos desde la cúpula de Morena y del gabinete lopezobradorista, no los ven en la agenda del 2022.

Héctor Garza, El Guasón, se mueve más por interés y decisión personal que por encargo presidencial, y la prueba más contundente es que ni en la lista de invitados de los eventos de  Morena en el Estado, aparece. Erasmo González, diputado maderense, y a quien ubican muy cercano a Mario Delgado, su proyecto real no es el 2022, como algunos lo dicen y lo escriben; el proyecto de Erasmo es la senaduría del 2024, y sabe que para conseguirlo tiene que sumarse a la unidad de todos, por eso anda y va a todas las fiestas morenistas que lo invitan, y a la que no lo invitan también. José Ramón Gómez Leal alias «JR», simplemente falló, y aunque algunos jilgueros desinformados le ponen veladoras, no está en la agenda de la sucesión. Adrián Oseguera, es buen alcalde que debe ganar la reelección en Madero, pero tampoco se le ve más allá del embudo del ex sólido sur.

En la lucha por el poder, los protagonistas deben entender cuales son sus alcances y sus posibilidades reales. Alcanza el poder, no el más inteligente, no el más preparado, no el que habla mejor, tampoco el más guapo, ni el más popular. Gana el que crea su propia circunstancia, el que hace los amarres políticos exactos, el que tiene sus mecenas que le invierten y arriesgan dinero, y al que está cerca de los afectos del todopoderoso, en este caso El presidente. Y sobre todo, el que entiende que la política se hace con dinero.

Y algo más que deben saber los aspirantes de Morena al 2022 en Tamaulipas. Cuando se iban a definir las candidaturas en los 15 estados donde habrá elección para gobernador, el Presidente López Obrador, les dijo a sus hombres cercanos como Marcelo Ebrard, Ricardo Monreal, Mario Delgado y Claudia Schinbaum que andaban promoviendo candidaturas de sus amigos: 

«Los candidatos a gobernador, los decido yo». 

La política y las decisiones de poder, se han centralizado como en el viejo régimen priísta. La democracia en México se disfruta más cuando cuando la amistad con el que manda es lo que vale.