CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.
Un total de 280 personas privadas de la libertad (PPLs) recibieron constancias de capacitación laboral en los Centros de Ejecución de Sanciones (CEDES) de Matamoros, Reynosa y Altamira, como parte de las acciones de formación para el trabajo y reinserción social impulsadas por la Secretaría de Seguridad Pública de Tamaulipas (SSPT), en coordinación con el Instituto Tamaulipeco de Capacitación para el Empleo (ITACE) y el Instituto de Capacitación para el Trabajo (ICAT).
En el CEDES Matamoros, la entrega se realizó en el salón de usos múltiples, donde 119 PPLs concluyeron satisfactoriamente cursos impartidos por el ITACE.
La ceremonia contó con la presencia de autoridades educativas y penitenciarias, y destacó la participación de la banda de guerra y la escolta, integradas por PPLs, como reflejo de disciplina, compromiso y organización al interior del centro.
Por su parte, en el CEDES Reynosa se entregaron 73 constancias derivadas del Convenio de Colaboración entre el ITACE, la SSPT y el Instituto de Capacitación para el Trabajo.
Las certificaciones beneficiaron a 57 hombres y 16 mujeres, quienes concluyeron especialidades como soldadura, carpintería y técnicas para el cuidado corporal, fortaleciendo sus competencias laborales.
A estas acciones se sumó el CEDES Altamira, donde en colaboración con el ICAT, se entregaron 88 constancias a PPLs que participaron en capacitaciones desarrolladas durante los meses de agosto, septiembre, octubre y noviembre del presente año.
Los cursos impartidos abarcaron especialidades técnicas y productivas, entre ellas mantenimiento industrial básico, electricidad en niveles básico y avanzado, introducción a la soldadura nivel III, así como diversos talleres de cocina regional, comida típica mexicana, elaboración de conservas, productos lácteos, chorizo artesanal y postres, además de múltiples módulos de arte y técnicas de crochet, incluidos adornos navideños y confección de prendas.
Estos programas de capacitación cumplen con el objetivo de que los PPLs adquieran conocimientos, habilidades técnicas y competencias laborales, permitiéndoles desarrollar actividades productivas durante su reclusión y contar con mayores oportunidades de inserción laboral al recuperar su libertad, en apego a lo establecido en la Ley Nacional de Ejecución Penal.







