CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.

El Gobierno de Tamaulipas a través de la Secretaría de Finanzas, propuso al Congreso del Estado refinanciar una deuda por más de 13 mil millones de pesos que heredó el gobierno de Francisco García Cabeza de Vaca.

La ruta para este objetivo, no parece nada sencilla porque Morena requiere del voto de las dos terceras partes de los diputados presentes.

Un primer paso, se podrá conocer cuando se analice en Comisiones y se fijen los criterios de los diputados del PAN, Morena, PRI y Movimiento Ciudadano donde quizás, la iniciativa pueda ser dictaminada.

El plazo del o los refinanciamientos y/o reestructuras que se propone sería hasta por 25 años, contados a partir de la celebración de los contratos respectivos.

Dentro de la iniciativa que presentó el gobernador del Estado Américo Villarreal Anaya, se menciona que la deuda actual del Gobierno de Tamaulipas es de 15 mil 677 millones de pesos, de esto se busca reestructurar 13 mil 006 millones 794 mil pesos.

“Se ha vuelto indispensable para la hacienda pública del Estado el buscar mejorar las condiciones existentes de la deuda pública a cargo del mismo, como parte de las medidas para hacer frente al déficit presupuestario que ha sufrido el Estado”, se menciona en la iniciativa.

Además, justifica que hay factores como la creciente inflación global, el incremento de las tasas de interés interbancaria, la sequía en el país que ha provocado escasez de ciertos cultivos, la crisis climática global, y el contexto medioambiental y social del país y del Estado, han agravado el endeudamiento de entidades como Tamaulipas.

Por lo anterior, justifica, es necesario refinanciar y/o reestructurar la deuda pública para hacer más ligeros los compromisos en la materia por parte del gobierno estatal.

Los 13 mil millones de pesos que se buscan reestructurar corresponden a cinco créditos contraídos con el banco BBVA Bancomer en el año 2018, dos cerditos más contados en el año 2017 con Banorte y un crédito más en este mismo año con el Banco Nacional de México y un crédito más en BBVA Bancomer en el año 2010.

Garantizó que la contratación de los instrumentos financieros se hará, “manteniendo un manejo prudente de la deuda pública directa y fortaleciendo la hacienda pública sin comprometer la viabilidad financiera ni la calificación crediticia del Estado”.

Además se busca en esta iniciativa, formar un Fideicomiso para que este sea usado para pagar un solo crédito, con una tasa de interés menor y con pagos menores a los que actualmente se hacen de forma mensual, esto para dar un “respiro” a las finanzas estatales.