CIIUDAD DE MÉXICO.

Con militantes provenientes de Hidalgo, Querétaro, la Ciudad de México y predominantemente de Tabasco, la explanada del Teatro Morelos, en el centro de Toluca, Estado de México, lució repleta para que el presidente nacional de Morena, Mario Delgado, diera el banderazo de salida y arrancar con la organización de las elecciones presidenciales de 2024, y también para renovar dirigencias y estatutos del partido en un Congreso Nacional.

Previo a eso, los invitados llegaron a cuentagotas, los primeros, algunos gobernadores emanados de Morena, le siguió el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Gutiérrez Luna, posteriormente los candidatos electos de Quintana Roo, Mara Lezama; de Oaxaca, Salomón Jara, y de Tamaulipas, Américo Villareal, el primer presidenciable en subir al templete fue el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, quien fue recibido al grito de “¡Marcelo presidente!, ¡Marcelo presidente!”.

Con más de una hora de retraso, arrancó el evento nombrado “Unidad y Movilización para que Siga la Transformación” en el centro de Toluca. Luego del canciller, el secretario de Gobernación, Adán Augusto ocupó su lugar a lado del dirigente de Morena, Mario Delgado.

En tanto, la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, fue la última en subir al templete, que apenas se alcanzaba a ver por las grandes banderas que ondeaban en apoyo a Morena, pero principalmente al secretario de gobernación Adán Augusto López, pues varias de las mantas tenían impresa la imagen del funcionario federal.

El último en hablar fue Mario Delgado, quien aprovechó la presencia de los presidenciables, mejor conocidos como “las corcholatas” la jefa de Gobierno y los secretarios de Gobernación y Relaciones Exteriores para anunciar la tan esperada encuesta que, pese a las voces que no la ven como opción, se prevé que sea el método para elegir a candidato presidencial de Morena.

Previo a ello, dijo que es momento de convocar a la reorganización interna del partido, con el compromiso de la unidad “por delante”, dijo Delgado que es necesario renovar los documentos internos, los estatutos para arrancar renovados la organización de las elecciones presidenciales.

Con el sol a plomo, los cientos de militantes que llegaron en autobuses desde diversas partes del país desde las siete de la mañana y esperaron horas en el rayo de sol, se dispersaron inmediatamente apenas su dirigente dijo su ya tradicional cierre “¡Que viva, que viva Morena!”.