REYNOSA, Tamaulipas.

En este miércoles de lluvias intensas, la ciudad se paralizó por la inundación de pasos a desnivel, pero también perjudicó en gran medida al comercio local.

Los taxis y rutas urbanas “se escondieron” por el problema de circulación en las avenidas.

Los que sufrieron fueron los pasajeros que no tuvieron manera de moverse a sus casas o centros de trabajo.

“No queremos ir porque no hay paso en muchas áreas de la ciudad”, dijo un taxista vía telefónica, quien se quejó del pésimo sistema de drenaje pluvial que cuenta Reynosa.
En un recorrido por Plaza Real no había largas filas en los bancos, tampoco había clientes en las cajas de HEB.

Universidades y escuelas locales como la Universidad Tamaulipeca suspendieron las clases por zoom, ante el temor de una baja de voltaje en el área.

Sin lugar a dudas Reynosa no está preparada para la llegada de trombas o huracanes, dijo una cliente que llegó empapada al centro comercial.