Por Antonio de la Cruz
CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.
Los agricultores del norte de Tamaulipas, a pesar de estar viviendo una de las peores crisis por la falta de apoyos gubernamentales y la sequía en sus parcelas, están pidiendo la intervención divina, para que por lo menos les manden la lluvia a través de procesiones de santos como San Isidro Labrador, que es llevado a las parcelas.
Desde las comunidades de San Fernando en la zona de González Villarreal, hasta, Valle Hermoso y Río Bravo, durante este fin de semana se llevaron acabo peregrinaciones donde participaron los agricultores y sus familias.
Rubén Chapa Garza, dirigente de los productores de la asociación Amistad-Falcón del Distrito 025, dijo que debido a que han sido ignorados por las autoridades de la Comisión Nacional del Agua y despojados de sus reservas por ese organismo, ahora a los productores solo les queda pedir la intervención divina para tener buenas cosechas.
“Hemos sido víctimas de la sequía, así como la ineficiente distribución del agua de la Cuenca del Río Bravo, para el Distrito de Riego 025, por la CONAGUA, por lo que ahora solo nos queda pedir a los santos la lluvia”.
Dijo que en días pasados lo hicieron productores de San Fernando, y después los habitantes del poblado de Anáhuac de Valle Hermoso, donde sacaron a pasear a San Isidro Labrador a las parcelas para pedirle la lluvia.
Cabe destacar que en el pasado periodo de ciclones a Tamaulipas, solo la región por arriba de Reynosa fue la que recibió escurrimientos importantes luego de que llegaron los remanentes del Huracán Hanna, sin embargo para el resto del estado no llegó nada de agua.
Agregó que a esto se le suma el conflicto que existe en la parte alta de la Cuenca Alta del Río Bravo, que aportan entre otros el Río Conchos en Chihuahua, donde tienen almacenada agua en las presas y se niegan a compartirla con Tamaulipas, por capricho de los productores y la tolerancia de las autoridades de la CONAGUA y otras instancias federales.
Chapa Garza, dijo que la sobreexplotación de la Cuenca Alta del Río Bravo, así como el robo de agua por parte de los usuarios de Chihuahua, han reducido los últimos años a la mitad el aporte para el Distrito 025 del Bajo Río Bravo, que comprende 202 mil hectáreas.
Para este ciclo agrícola otoño-invierno, no había agua en las presas internacionales Amistad-Falcón, ni para asegurar medio riego, por lo que se sembraría como zonas temporaleras.
Se trata de la zona de mayor productividad agrícola de Tamaulipas, pues se siembran maíz y sorgo para el abasto nacional.
Tamaulipas aportaba hasta hace unos años 2 millones 500 mil toneladas de sorgo y casi un millón de toneladas de maíz blanco y amarillo, pero el ciclo pasado se redujo apenas a 1.3 millones de toneladas de sorgo y unas 700 mil toneladas de maíz, mientras que para este año se vislumbra una catástrofe agrícola si no llueve.
